Trabajamos en conjunto con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, para abordar la situación de seguridad en nuestras fronteras. El objetivo es intensificar la presencia de las fuerzas federales en las zonas fronterizas y avanzar en la lucha contra los delitos transnacionales.

Dialogamos sobre la agenda en materia penal a trabajar en el Congreso de la Nación y aunamos esfuerzos para ratificar el rumbo del cambio que merece la Argentina.

La reunión forma parte del compromiso que tenemos para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los misioneros.

Actualmente, el registro se limita a delitos cometidos por ofensores sexuales. La iniciativa busca extender a todos los delitos, con el objetivo de entrecruzar información, comparar huellas genéticas obtenidas en la escena del crimen con el perfil genético de imputados y condenados e identificar a los autores.

Otro tema de debate en el Congreso argentino fue la ampliación del Registro Nacional de Datos Genéticos. Actualmente, el registro se limita a delitos cometidos por ofensores sexuales. La iniciativa busca extender a todos los delitos, con el objetivo de entrecruzar información, comparar huellas genéticas obtenidas en la escena del crimen con el perfil genético de imputados y condenados e identificar a los autores.

Acompañamos la media sanción ya que el nuevo registro permitirá esclarecer muchos hechos que al día de hoy siguen impunes y también es una herramienta para probar la inocencia. Como en el pasado fue el uso de la huella dactilar, en la actualidad, los datos genéticos son una muestra de la importancia de incorporar la tecnología para encontrar a los delincuentes y proteger a las víctimas. Este registro va a traer mayor celeridad en los procesos y mayores posibilidades de esclarecimiento.

La normativa fue girada al Senado de la Nación y espera su sanción definitiva en la cámara alta. La propuesta aprobamos con 146 votos afirmativos, 87 negativos y 7 abstenciones. Durante la sesión contamos con el apoyo de la organización “Madres del Dolor”. 

Aprobamos la ley que declara a la educación como Servicio Estratégico Esencial.  Con media sanción y de ser aprobada en el Senado, el estado nacional y las provincias deberán garantizar el ciclo lectivo de 180 días de clases.

En una sesión intensa en el Congreso de la Nación aprobamos la ley que declara a la educación como Servicio Estratégico Esencial.  Con media sanción y de ser aprobada en el Senado, el estado nacional y las provincias deberán garantizar el ciclo lectivo de 180 días de clases, con guardias mínimas del 30% del personal docente y no docente, durante las jornadas de paros o huelgas. En caso de que la medida de fuerza se prolongue por más de dos días, el documento propone que el porcentaje se incremente al 50%.

Votamos a favor de la iniciativa que permite que hoy ganen la educación, los estudiantes y maestros. Desde la Ley N°1420, la educación argentina fue un faro cultural y educativo para toda América. Eso se sostuvo hasta los años 60 hasta que comenzó a caer y se volvió lo que vemos hoy, una tragedia educativa, acentuada por la pandemia donde las escuelas estuvieron cerradas.

Las estadísticas de organismos internacionales, nacionales y entes provinciales demuestran la caída del proceso de aprendizaje y que solo un tercio de las y los estudiantes terminan la escuela secundaria. Esta iniciativa en cierto modo regula el derecho a huelga. Nuestra Constitución Nacional prevé que ningún derecho es absoluto. Lo que buscamos acá es que, ante la puja de dos derechos, se garantice el derecho a la educación sin eliminar el derecho a huelga.

El 9 de julio, día de la Independencia, estuve presente en Tucumán para acompañar la firma del Pacto de Mayo. La rúbrica del documento sienta las bases para avanzar con las reformas que necesita el país.

Este pacto tiene el objetivo de reconstituir las Bases de la Argentina y cuenta con 10 puntos:
La inviolabilidad de la propiedad privada.
El equilibrio fiscal innegociable.
La reducción del gasto público a niveles históricos, en torno al 25% del Producto Bruto Interno.
Una educación inicial, primaria y secundaria útil y moderna, con alfabetización plena y sin abandono escolar.
Una reforma tributaria que reduzca la presión impositiva, simplifique la vida de los argentinos y promueva el comercio.
La rediscusión de la coparticipación federal de impuestos para terminar para poner fin al modelo extorsivo actual que padecen las provincias.
El compromiso de las provincias argentinas de avanzar en la explotación de los recursos naturales del país.
Una reforma laboral moderna que promueva el trabajo formal.
Una reforma previsional que le dé sostenibilidad al sistema y respete a quienes aportaron.
La apertura al comercio internacional, de manera que la Argentina vuelva a ser protagonista del mercado global.